Claudio Morresi es ex futbolista, jugador en la selección nacional juvenil. Fue Secretario de Deportes de la Nación entre 2004 y 2014 y este año es candidato a Legislador por la Ciudad de Buenos Aires en la lista del Frente de Todos.
Conversó con #NoticiasDeAyer sobre la situación económica, social y educativa de la CABA y las propuestas del Frente de Todos, sobre las políticas de Deportes de Cambiemos a nivel nacional y local, sobre el negocio inmobiliario en torno al CENARD, y sobre la función social del deporte y la formación de deportistas como política pública.
Al consultarle por su candidatura, Morresi explicitó la responsabilidad que la misma conlleva en cuanto a la situación en la que está la Ciudad de Buenos Aires:
“Es un desafío grande. Uno tiene la representación de muchísimos compañeros que han decidido que uno integre este Frente (Frente de Todos) para poder, de alguna manera, cambiar el ideario, la ideología, que hoy gobierna la Ciudad de Buenos Aires desde hace 12 años, y que está haciendo que esta Ciudad, que es la más rica del país, sea tan injusta y tan desigual, e intentar que eso no siga ocurriendo. Vos analizas los datos del sur de la Ciudad, y ves que en esa zona la mortalidad infantil ha aumentado, que los índices de falta de trabajo cada vez son mayores, que los pibes que van a nuestras escuelas no encuentran vacantes. Y decís ¿cómo puede ser posible si la Ciudad de Buenos Aires es la ciudad más rica de nuestro país?”
Pero también afirmó que podría ser diferente:
“Hemos demostrado en otros tiempos de nuestra historia, que puede ser de otra forma la manera de vivir. De alguna manera, todos podemos cumplir muchos más de nuestros derechos, podemos llegar a vivir mucho mejor.”
Acerca de la situación de la política pública actual relativa al deporte, el candidato fue contundente aportando datos cuantitativos:
“Cuando decimos ajuste, decimos por ejemplo que a nivel nacional había 1.350 millones de pesos de presupuesto para el deporte argentino en el año 2016, y hoy hay, en el año 2019, 991 millones de presupuesto. Y no olvidemos que hubo, pongámosle, un 100% de inflación, vos tendrías que tener 2700 millones de pesos para tener el mismo presupuesto que en el año 2016, y tenés 991; así que es más del doble el ajuste que han hecho.”
Y aclaró que estos números son el resultado de la concepción ideológica de Cambiemos y que tiene consecuencias directas en la composición socio-económica del colectivo de deportistas nacionales:
“Esto se está sintiendo fuertemente en todo lo que es apoyo a los clubes de barrio, en todo lo que tenga que ver con el deporte social, el deporte de alto rendimiento con sus becas, con su acompañamiento para viajes o compra de material deportivo; haciendo que solamente puedan acceder a integrarlas los que vienen de familias acomodadas que puedan solventar lo que el Estado no puede llegar a realizar.”
A raíz de estas reflexiones, comentó la situación de fondo respecto al uso de los terrenos del CENARD:
“Y la frutilla de esta torta es que el lugar donde hay infraestructura deportiva, es decir donde hay varios gimnasios, y hay una pileta olímpica, y pistas, canchas de hockey, de patín, de fútbol para ciegos, es decir donde todos invertimos durante muchísimo tiempo más de 100 millones de dólares en la construcción de todo lo que existe en el CENARD, la escuela donde estudian nuestros deportistas pero también estudian los jóvenes que viven en el barrio de Núñez, más el Instituto Romero Brest que es donde se perfeccionan y gradúan los profesores de educación física, lo piensan tirar abajo para construir torres de 40 pisos para su sector social privilegiado para que puedan ver el río desde sus departamentos.”
Claudio Morresi también se explayó sobre la importancia social de los clubes de barrio y su alarmante situación de crisis:
“Los pibes que tenés adentro de un club incorporan valores que tienen que ver con el resto de la vida como la solidaridad, el compañerismo, el esfuerzo. Pero hoy por hoy, por ejemplo, las actividades que esos clubes tenían nocturnas, donde estaban las pibas haciendo patín, o algunas divisiones de chicos que juegan en campeonatos internos, tienen que empezar a apagar las luces porque no pueden sostener las luces de acuerdo a los tarifazos que ha dado este gobierno. Más que el poder adquisitivo de los padres cada vez es menor y no le pueden pagar la cuota. Entonces, los clubes barriales, que sostuvieron y que fueron integradores y armaron todo el tejido social que existe en la Argentina, para que los hijos de los laburantes, los hijos de las clases medias, pudieran tener este tipo de actividades, también empiezan a ser cercenadas por estas políticas neoliberales.”
Por último, el ex futbolista se metió con aspectos pedagógicos de la formación de deportistas:
“Cuando fui Secretario de Deportes tuve discusiones muy fuertes con el área de la AFA de lo que tiene que ver con el fútbol infantil. Porque, a mi entender, y hoy lo corroboro, todo lo que tiene que ver con el aprendizaje de la técnica deportiva en las edades de los 10 a los 14 años, no la estaban llevando de la manera adecuada. Porque hacer jugar pibes de esas edades en cancha de 100 metros con pelotas número 5, y donde lo importante es tener algún tipo de resultado, antes de priorizar el aprendizaje de la técnica, que se hace en espacios más reducidos, donde ganar o perder no tiene tanta importancia, iba a afectar al crecimiento de jugadores de nuestro país.”
