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El Homo videns y su dedo acusador.

Somos una sociedad embelesada por las imágenes que se emiten por los medios electrónicos, Tv y celulares, nos dicen que pensar, como actuar, que decir, somos una sociedad que no distingue de tragedias, que no se permite una simple reflexión.





Giovanni Sartori, fue un politólogo y sociólogo italiano, quien supo teorizar sobre la influencia de la televisión y como modifica la naturaleza de la comunicación, “traslada del contexto de la palabra, al contexto de la imagen”, una nueva manera de entender, sin la necesidad de comprender, teoriza Sartori en su libro, “Homo videns: la sociedad teledirigida”.


Un enfrentamiento que tuvo lugar en un complejo deportivo en la provincia de Buenos Aires, donde por cuestiones “del juego” golpearon a un árbitro de futbol, el hecho fue grabado con un celular. Esas imágenes se diseminaron en las redes sociales como fuego en campo seco, se etiquetó a las personas, al complejo deportivo, se usaron palabras como animal, asesino, en los noticieros hablaron del agresor como una persona enferma, emitieron juicios de valor, los cuales aceptamos sin el más mínimo miramiento, las imágenes “hablaban por sí solas”.


Víctima de esa exposición, de ese “juicio de valor” mediático, aquel joven se quitó la vida, “no puedo más, no soy fuerte, no sé qué me pasa, no soy yo”, expreso en un mensaje de audio. Miramos el mundo desde las ventanas del ordenador y opinamos sobre él en las diversas redes sociales, somos aquel control invisible, el cual refería George Orwell en su clásica obra “1984”.


Recordamos algunos ejemplos, que esperamos ayuden a comprender está exposición mediática.




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