El vicepresidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos en Argentina y coordinador de la defensa jurídica de Milagro Sala, el Dr. Eduardo Tavani, pasó por #AnocheceEnBuenosAires y se refirió a los DD.HH., el respeto y vigencia en la actual situación del país.
El abogado laboralista explicó que: “En materia de derechos humanos, estamos complicados porque venimos de 4 años de arrasamiento, de saqueo, de lo que significó las políticas neoliberales tomadas por el gobierno de Macri y sus aliados y eso obviamente generó una grave lesión a los derechos de nuestros pueblos y eso es lo que pasó entre fines del 2015 y fines del 2019. Ahora estamos tratando de remontarla, pero no es fácil. Le ha tocado una dura tarea al gobierno nacional de llevar adelante una epopeya para dar vuelta esta historia, pero además apareció la pandemia, con lo cual todo se ha complejizado un poco más. En materia de derechos humanos, el gobierno de Alberto Fernández tiene una mirada sobre justamente los daños que ha sufrido nuestro pueblo, el gobierno nacional tiene un compromiso con los derechos humanos que no existió en los 4 años del neoliberalismo de Macri”.
Además, Tavani expresó que “el gobierno de Macri es una saga que se llevó puesto a nuestro país, se llevó a muchas conquistas que luego de mucha lucha se fueron realizando, que muchos de quienes lo acompañaron tienen vínculos de aquellos otros que fueron responsables, cómplices de los golpes de estado en Argentina, sobre todo el último que se inauguró el 24 de marzo 1976. Esta vez usaron los medios masivos de comunicación, los medios concentrados y una buena parte del poder judicial para llevar adelante el plan de reconquista o de sometimiento”.
Por otro lado, el vicepresidente de la Asamblea Permanente por los DD.HH. mencionó que “la gente ha empezado a ver las internas del Derecho, no solamente porque las padece sino también porque las escucha, lee, los medios no hegemónicos dan cuenta de esta realidad y empieza a surgir o a emerger la verdadera cara de un Poder Judicial que es clasista, misógino, excluyente, selectivo. El poder judicial se colonizó a partir de la decisión de quienes se hicieron del poder una vez consagrada la unión nacional, y las familias se repartieron los cargos a llevar adelante a través de decisiones totalmente arbitrarias con enormes privilegios, hasta hoy sucede y sigue siendo lo que fue. Esto se transforma con mucha tarea, mucha labor, mucho compromiso, mucha conciencia, mucha visibilización, pero no es una tarea de un día para el otro, no lo haces con una ley, lo tenés que hacer con muchas otras cosas más, tenés que llevar adelante un programa, es una cuestión del Estado: el contrato social de los y las argentinas tendría que tener centralmente contemplado el tema de la justicia”.
“Se entiende a la Justicia como sistema, como todo aquello que compone y conforma al poder judicial, que no son solamente los jueces o fiscales, sino mucho más que eso. Ahí hay una tarea enorme pendiente, pero creo que a partir del menemismo la justicia se empezó a prostituir de una manera brutal y siguió haciéndolo a lo largo del tiempo. Las leyes de democratización que intentó implementar el Kircherismo no pudieron implementarse, porque hubo una cerrada negativa de quienes son los privilegiados del sistema. Para transformarlo, se necesitan enormes consensos que se construyen a partir de una voluntad política. Creo que Alberto lo ha intentado con mucha generosidad en su primer año de gobierno y con grandes expectativas que, en realidad, no prosperaron. Siempre que se pretenden grandes transformaciones, uno piensa que sería procedente una reforma constitucional. Pero para eso también hay que ganar los consensos necesarios, pero no hay garantía de nada”, desarrolló el jurista.
Por otra parte, el coordinador de la defensa jurídica de Milagro Sala relató que su defendida, junto a sus compañeros de organización, “habían logrado en sus años previos transformar las realidades de las inmensas mayorías, protegidas, vulneradas, excluidas de Jujuy, es decir, el acceder a derechos que eran básicos y elementales, los cuales se consiguen con la impronta de Milagro y su organización. Eso no se lo perdona el sistema, no se lo perdona el poder, los grupos económicos concentrados y la política tradicional tampoco porque ésta política responde a los poderes concentrados, así que Milagro fue víctima de todo eso. Milagro sigue siendo hoy víctima del llamado Lawfare, lo que yo llamo persecución judicial o como se la quiera llamar, que no es novedosa, hace mucho tiempo se viene desarrollando esta práctica y que resulta ser un instrumento de sometimiento de su juzgamiento y de control social tratando de disciplinar, hostigando, criminalizando y encarcelando a los dirigentes que son capaces de enfrentar a los poderes fácticos. Milagro, desde su pensamiento, se les opuso, sigue siendo víctima de esa persecución neoliberal”.
Escuchá la entrevista completa acá:
Redacción: Paula Serricchio
