La Investigadora del CONICET, Directora del Centro de Innovación de
los Trabajadores (UMET) y docente de la UBA pasó por los micrófonos
de #Desmalezando y se preguntó: “¿Cómo se logra reconstruir un lazo
social entre nosotros después de todo esto?”
Paula Canelo viene de participar en un texto clave en aquello que se denomina
la “Post-Cuarentena”. Es el texto que compiló Alejandro Grimson y reunió
trabajos de investigadores, docentes, académicos y especialistas (El futuro
después del COVID-19), donde participó con un artículo: “Igualdad, solidaridad
y nuevo estatalidad. El futuro después de la pandemia”.
¿Cuál es el mayor problema que identifica Canelo en el porvenir apenas
pasada la peste? “Yo vengo pensando desde Cambiemos y su gobierno, que
fue legitimado después de todo el daño que hizo, por casi el 40% de la
población en las urnas, en la certeza de nuevas preferencias electorales por
proyectos que prometen consagrar las desigualdades. Yo venía teniendo una
idea de que hay una preferencia por la desigualdad, eso implica no considerar
a los demás como iguales”, disparó.
Las resistencias a la solidaridad que proclama Alberto Fernández están a la
orden del día, eso hasta motivó el mote de miserables en una de las
conferencias del presidente, y para la investigadora la clave está en el Estado.
Sobre esto también se expresó: “¿Cuáles son las condiciones de nuevo Estado
que nos permitiría reconstruir el viejo Estado que ha sido quebrado? Aparece la
idea de nueva estatalidad, cosa que construyo a partir de mis propios
intereses.”
Las crisis traen oportunidades. Y para Canelo, está no es la excepción:
“Estamos en un momento para desnaturalizar cosas. Esa idea del Estado
elefantiásico, que es un coto de caza, un estado torpe que solo quiere tributar y
sacar recursos a lo productivo es algo que traemos hace décadas. Tratando de
ver algo bueno dentro de todo esto, podemos pensar que la ruptura de esta
normalidad nos permite identificar que hay un Estado que nos faltó. El IFE lo
refleja, el trabajo doméstico no registrado, el avance del cuenta propismo, y el
gobierno hace meses trata de llegar a esos sectores para tratar de sostenerlos
y le cuesta mucho…”
Y profundizó esta idea: “Hay que crear un nuevo pensamiento estatal, no
órganos ni coordinaciones, sino un Estado que se piense a sí mismo. El nivel
de resistencia al Impuesto a las Grandes fortunas que es una contribución por
única vez de los seres más acaudalados de la Argentina, y no una expropiación
a un dueño de una Pyme, refleja el poder y la correlación de fuerzas de este
Estado. La solidaridad es para todos menos para algunos parece.” Y cerró con
un deseo: “La ética estatal debe ser orientada por la igualdad, solidaridad y
responsabilidad.”
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