Arquitecto especializado en planeamiento urbano y regional y actualmente Director de Derechos económicos, sociales y culturales e inclusión social del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). Participa desde su origen en Habitar Argentina.
Conversamos con él sobre la problemática de los alquileres y la urbanización de villas en la Ciudad de Buenos Aires, las políticas de acceso a créditos hipotecarios y los principales ejes de una futura política de acceso al hábitat.
Primero presentó el espacio Habitar Argentina:
“Habitar Argentina son unas 60 organizaciones, preocupadas por los temas de hábitat. Y en estos 10 años hemos venido haciendo distintas acciones, algunas de incidencia política, otras de propuestas concretas legislativas en el marco de la agenda legislativa de hábitat, de vivienda, de tierras, etc.”
Específicamente, Eduardo se explayó acerca la problemática de los alquileres en general y en la Ciudad de Buenos Aires en particular:
“Tuvimos también muchísima discusión y acción con el tema de la Ley de Regularización de alquileres que finalmente no salió. Y que nos tiene muy preocupados, porque es una agenda, la de inquilinos, muy relevante en el país. Estamos hablando de casi 8 millones de personas.”
“En la Ciudad de Buenos Aires el tema de alquileres es un tema particular, porque aproximadamente un tercio de las familias de la Ciudad alquilan, o un poco más, el 35%. El alquiler ha ido creciendo de manera importante en todo el país, pero muy particularmente en Capital Federal, porque ahí se suma un segundo factor que es el incremento de los precios de los inmuebles, mucho más que en otras ciudades. Eso hace a la imposibilidad de pago, primero porque muchos años no hubo crédito hipotecario o no hubo una oferta robusta de créditos hipotecarios, y cuando la hubo con el advenimiento del actual gobierno, terminó siendo una estafa a favor de los bancos, y eso hoy está enormemente resentido.”
A partir de esto, le consultamos por las políticas de créditos hipotecarios como alternativa a la situación crítica de los inquilinos:
“El crédito hipotecario es importante dentro de cualquier política de vivienda. El problema es cuando es la única, como en este gobierno, que dejó de construir vivienda social, dejó de hacer PROCREAR, y se dedicó a dar créditos hipotecarios porque es la herramienta del mercado que el Banco Mundial y el FMI le recomiendan. En ese contexto de enorme gravedad social, la única herramienta que hubo fue un crédito hipotecario que tiene todas las ventajas para que el mercado financiero gane, y el que toma un crédito está destinado a ser una suerte de rehén del mercado financiero y de los bancos. En estas condiciones, el crédito hipotecario fracasa, o fracasó. Se dieron 100 mil, y de esos, hoy, la enorme mayoría ya no está pudiendo pagar.”
Otro tema central en la problemática del hábitat y la vivienda en la CABA es la política de urbanización de villas, sobre lo que el arquitecto buscó poner claridad y complejidad, develando el “maquillaje” que se le quiere imponer a este proceso:
“Voy a enmarcar el tema en un marco más general. La puesta en marcha de la urbanización de cuatro villas, la 20, la 31, la Rodrigo Bueno y la de Chacarita, va de la mano con una política urbana que el Gobierno de la Ciudad ha llevado a cabo durante estos cuatro años, enormemente grosera en términos del favorecimiento que ha tenido el mercado inmobiliario, y que explica por qué los precios del suelo han aumentado de una manera tan grosera. Tenés una política urbana pro-mercado que lo que hace es seguir expulsando gente al Gran Buenos Aires porque ya es imposible, no solamente comprar sino también alquilar, y después hacés una especie de caricatura de urbanización de 4 villas.”
Por último, Eduardo plasmó los ejes principales de una política a futuro que vaya en línea con mayores niveles de justicia en el acceso al hábitat, y que están plasmados en la Ley de Acceso al Habitat de la Provincia de Buenos Aires:
“La Ley de Acceso al Habitat da, de alguna manera, una suerte de muestrario de lo que nosotros pensamos que hay que hacer. Primero, empezar a romper los mitos de que el problema de la vivienda en Argentina se soluciona construyendo más vivienda solamente. Hay que construir vivienda, pero hay que meterse con el mercado inmobiliario, hay que regular los alquileres, hay que meterse con el tema del suelo, hay que romper con los procesos especulativos. Tener 150 mil viviendas vacías en la Ciudad de Buenos Aires es un horror; y tener lo mismo pero en lote, en tierra vacía en el Gran Buenos Aires es otro horror, cuando tenés el déficit que tenés. Si vos solo hacés casitas y no atacás esos problemas, vas siempre atrás.”
Volvé a escuchar la nota acá:
